… “Y sábete, hijito mío, que yo te pagaré tu cuidado y el trabajo y cansancio que por mí has emprendido” (94 Nican Mopohua)

Estas palabras de la Santísima Virgen de Guadalupe a San Juan Diego resonaron en mi corazón cuando recibí sorpresivamente la noticia del fallecimiento de nuestra querida hermana Maricarmen Villar,  sentí por supuesto  la tristeza que nos causa despedirnos de personas tan especiales,  pero también pude sentir la certeza e imaginé el gozo en Maricarmen al tomarse de la mano de Nuestra Madre conduciéndola al Cielo como ha prometido a quienes a diario recen el Rosario, aquellos hermanos que oran y se donan por amor, aquellos a quien Ella les llama  sus apóstoles del amor  y es Maricarmen un ejemplo de ello.

La conocí en el año 2013, cuando nos tocó apoyar, junto con Lety y Belia, a P. Rafael Zacarías en la organización del Encuentro Nacional de los Centros y Grupos de Oración en México, teniendo como sede la ex Hacienda de la Beata Conchita Cabrera en San Luis Potosí, sin tener mucho conocimiento de nuestro apostolado, Maricarmen fue una pieza medular en la organización de este encuentro y creo que a partir de ese precioso encuentro de oración, la Santísima Virgen María (como ella solía llamarle con mucha devoción) la hizo su apóstol y nuestra hermana le dijo sí, tal fue su cercanía que en la siguiente elección del Equipo Coordinador Nacional es Maricarmen junto a padre Amilcar, que en Gloria esté, quien es elegida para encabezar este Equipo Coordinador Nacional, arduo fue su trabajo, se ocupó de continuar los trabajos que había comenzado el padre Rafael y más tarde con padre Marcelino logran integrar los grupos de oración María Reina de la Paz México a la Comisión Nacional de Laicos, se empezaron los trabajos de actualización de los estatutos buscando tener reconocimiento en la CEM, dicho trabajo a causa de la pandemia se detuvo y estamos a la espera de que pronto se retome, si Dios lo permite.

Quienes tuvimos la bendición de conocer y mantener una amistad cercana con Maricarmen, de sostener una agradable conversación y una buena copa de vino que ella misma elaboraba y nos compartía, vamos a extrañar su cálida sonrisa, sus anécdotas y sus muchas enseñanzas, la despedimos con gran cariño y deseamos para toda su familia la paz que viene al corazón cuando se tiene la esperanza de que nuestra hermana hizo vida este mensaje:

“¡Queridos hijos! Hoy los invito a todos a que se decidan a orar por mis intenciones. Hijitos, Yo los invito a todos a ayudarme a realizar mi plan a través de esta parroquia. Ahora, de una manera especial, hijitos, los invito a decidirse a recorrer el camino de la santidad. Sólo entonces estarán cerca de Mí. Yo los amo y quiero conducirlos a todos conmigo al Paraíso. Pero si no oran y no son humildes, ni obedientes a los mensajes que les estoy dando, no podré ayudarlos. Gracias por haber respondido a mi llamado! ” 25 ABR 94

De izquierda a derecha Maricarmen Villar, Erika Sandoval, Lety Llamas, Hilda Ortíz, Alex y María Loera.  2017 al salir de la Capilla de San Benito en el Centro Escolar del Lago, Cuatitlán Itzcalli.

En primer plano nuestro muy querido padre Alfonso Romero, Erika Sandoval, Lety Llamas, padre Marcelino y Maricarmen Villar en vuelo a Buenos Aires para el Encuentro Iberoamericano.

Maricarmen Villar junto a los padres Francisco, Marcelino y Edgar en la Casa de los Jesuitas, sede del Encuentro Iberoamericano, Argentina.

Excelente guía en nuestro recorrido por la Recoleta en Buenos Aires, aquí revisando la ruta a seguir.

“Queridos hijos, sé que estoy presente en vuestras vidas y en vuestros corazones. Siento vuestro amor, escucho vuestras oraciones y las dirijo a mi Hijo. Pero, hijos míos, mediante mi amor maternal, yo deseo estar en la vida de todos mis hijos. Quiero reunir a todos mis hijos a mi alrededor, bajo mi manto maternal. Por eso, os invito y os llamo a vosotros, apóstoles de mi amor, para que me ayudéis. Hijos míos, mi Hijo pronunció las palabras “Padre Nuestro”, Padre Nuestro que estás en todas partes y en nuestros corazones, porque Él quiere enseñaros a orar con palabras y sentimientos. Desea que siempre seáis mejores, que viváis el amor misericordioso que es oración y sacrificio ilimitado por los demás. Hijos míos, dad a mi Hijo amor por el prójimo, dad a vuestro prójimo palabras de consuelo, de compasión y obras de justicia. Todo lo que dais a los demás, apóstoles de mi amor, es acogido por mi Hijo como un regalo. Yo estoy con vosotros porque mi Hijo desea que mi amor, como un rayo de luz, reanime vuestras almas y os ayude en la búsqueda de la paz y de la felicidad eterna. Por eso, hijos míos, amaos los unos a los otros, permaneced unidos por medio de mi Hijo. Sed hijos de Dios, que, todos unidos, pronunciáis el Padre Nuestro con un corazón pleno, abierto y puro. ¡Y no temáis! Os doy las gracias”.  2 de enero de 2020.

Te recordaremos siempre con gran cariño querida amiga, hermana en Cristo y La Gospa, descansa en Paz por la Misericordia de Dios.

Y, a cada uno de ustedes un abrazo con cariño y gratitud ya que han tenido la generosidad de unirse en oración nuevamente con nosotros en este momento de duelo ofrecido con amor a Jesús y Nuestra Madre.

 

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