Con la Santa Misa a las 5 de la mañana presidida por fray Zvonimir, el párroco de Medjugorje, el retiro espiritual para los jóvenes, el 34º Mladifest, culminó esta mañana en el Monte de la Cruz.

Cientos de jóvenes subieron durante toda la noche, algunos fueron al Križevac inmediatamente después de la santa misa vespertina y se quedaron a dormir en la cima: los jóvenes del coro internacional cantaron en la misa, y después de la misa continuaron en el Križevac con el canto al pie de la cruz.

“Jesús dice que el Reino de los Cielos es como un tesoro que el hombre encuentra, como una hermosa perla. Y cuando se encuentra, hay que venderlo todo para comprarlo. Esto significa que nada en este mundo es más valioso que el reino de los cielos. Con esta misa finalizamos el Festival de Jóvenes. Que nuestra decisión después de este Mladifest sea que queremos vivir con Dios. Que nuestro corazón siempre anhele a Dios, que nuestros ojos estén siempre fijos en el cielo, en el Reino de los Cielos. Y que nuestra madre celestial, la Reina de la Paz, nos ayude a alcanzar ese reino’‘, dijo fray Zvonimir Pavičić en su homilía, y los jóvenes bajaron del Križevac con cantos y oraciones en sus labios a lo largo de toda la mañana, anunciando su venida al próximo Mladifest también.

Durante los últimos cinco días, jóvenes de todo el mundo celebraron misas en Medjugorje, escucharon catequesis y conferencias, así como numerosos testimonios conmovedores, rezaron en la Colina de las Apariciones y en el Monte de la Cruz, y se confesaron en este confesionario del mundo…