El viernes 28 de mayo nos visitó una de los 6 videntes de Medjugorje, Marija Pavlovic, invitada por la Fundación Centro de Medjugorje de España. Acudió también a Madrid y a Sevilla durante el fin de semana.

El acto estaba previsto a las 6 de la tarde en la Parroquia de Santa María de Jesús de Gràcia, iglesia medjugoriana donde las haya, que acoge desde hace mucho tiempo al Grupo de Oración Reina de la Paz, de Barcelona, todos los primeros domingos de mes.

A las tres del mediodía teníamos una larguísima cola a la entrada de la iglesia esperando para entrar. Pudimos ver a muchos colegiales, algunos con sus flamantes uniformes, y de edades muy variadas. También vimos a personas mayores, con dificultades físicas importantes: sillas de ruedas, muletas, etc., familias enteras, sacerdotes y religiosas en número muy considerable, de órdenes y congregaciones diversas.

La expectación era muy grande, la organización lo previó todo, incluso se colocaron pantallas dentro y fuera de la iglesia para que todos pudieran seguir la ceremonia sin dificultad; en la calle se congregaron centenares de personas, a las que les fue imposible entrar en el templo, por no caber materialmente ni un alfiler. También se tuvieron que alquilar centenares de sillas para colocar estratégicamente en diversos puntos de la iglesia y dar cabida al mayor número de personas, con un mínimo de comodidades. Tambíén la organización se preocupó de todos los detalles como siempre, llegando a proponer, el alquiler de dos W.C. para situar en la explanada situada delante de la iglesia, pues con tanta afluencia de gente y por tantas horas, era de esperar serían necesarios, como se vio después.

Se distribuyó a todos los asistentes información sobre Medjugorje, estampas de la Reina de la Paz y una hoja de cantos para seguir la celebración.

A las 5 de la tarde, nos vimos obligados a abrir la puerta de la iglesia, pues la cola era larguísima y la gente llevaba ya dos horas de espera. Tuvimos que dejar entrar a la gente de manera controlada, pues eran ya muchos centenares de personas los que se agolpaban en la puerta. Por espacio de más de una hora y media fue un no parar de gente entrando en la iglesia. Daba gozo verlo.

Sabemos que se consagraron 2.000 formas, muchos de nosotros tuvimos que comulgar con un trocito y eran muchos los niños presentes que no habían hecho la Primera Comunión, lo que nos lleva a pensar que alcanzamos la cifra de 2.300 asistentes.

¡Es increíble el poder de convocatoria de la Gospa!, y sin ayuda de los medios de comunicación: ni prensa, ni radio, ni televisión. Pudimos ver caras de Galicia, de Navarra, de las Vascongadas, ¡¡¡y todo para rezar una tarde de viernes!!!.

Los sacerdotes confesaron sin descanso.

Fue una tarde de Oración, de Adoración Eucarística, de fervor mariano, de piedad.

Empezó el acto a las 6 de la tarde con el Rezo del Santo Rosario, dirigiendo cada misterio una persona diferente, acompañado por los cantos de Medjugorje; nos pareció más estar en Medjugorje que en Barcelona, tal era el fervor. Era precioso ver a tantas personas con el rosario entrelazado entre sus manos.

Pudimos ver personas de diferentes movimientos eclesiales: Camino Neocatecumenal, Carismáticos, Opus Dei, Schola Cordis Iesu, Obra de Ejercicios Parroquiales, cristianos de parroquia, también personas pertenecientes a plataformas sociales: Profesionales por la ética, e-cristians, Pro-Vida, etc., todos unidos bajo el manto de la Gospa.

Después del rezo del Santo Rosario, se celebró la Misa, mientras esperábamos a la vidente, que supimos venía su vuelo con retraso de hora y media. Eso no nos impidió seguir rezando con devoción. Después de la Misa, iniciamos otros 5 misterios del Rosario.

Uno de los sacerdotes asistentes al acto,recorrió todo el templo con la Custodia, bendiciendo a los presentes; fue un momento muy emotivo: lágrimas, expresiones de radiante felicidad, de una gran paz, y, sabiendo el sacerdote, que el exterior de la iglesia estaba abarrotado, salió con la Custodia a bendecir a todos los allí reunidos; impresionaba ver a tantas personas arrodilladas en plena calle, cuando se acercaba el Señor. ¡¡¡En esos momentos te das cuenta de que hay solución a todos nuestros problemas!!!

Finalmente, y ya pasadas las 8 de la tarde, llegó Marija. Subió al presbiterio con Sandra, la traductora, y nos obsequió con su testimonio, toda una lección de doctrina cristiana. Nos dijo que sentía no haber podido llegar antes y compartir con nosotros su aparición diaria; también nos prometió recurrir a la Gospa para pedirle por todos nosotros.

Nos encandiló a todos los presentes su sencillez y su claridad al exponer su testimonio; insistió en que debemos trabajar por nuestra santificación, ayudados de las 5 piedras; nos recordó a nuestro queridísimo Juan Pablo II, nos animó a ser las “manos prolongadas” de la Virgen, para ayudar al Señor en su plan de salvación para la Humanidad, nos recordó de nuevo la necesidad de orar, y de orar en familia. Nos habló de Satanás, y de su poder, de la necesidad de abandonar el mal y seguir el Bien. Insistió varias veces en la idea de que debemos ser las “manos prolongadas” de la Virgen, para llevar a todos a su hijo Jesús.

Al final cuando acabó todo, se veía algún rostro decepcionado por no haber podido estar en la aparición de la Virgen, pero al cabo de unos breves instantes, uno se da cuenta de que habiendo recibido a Jesús en la Eucaristía, habiendo rezado las dos partes del Rosario y habiendo vivido la Adoración Eucarística en un profundo clima de oración…..ese viernes fue un regalo del Señor.

Pedimos a Dios nos conceda el beneficio de una nueva visita de Marija a nuestra tierra.

Joana Vives
 

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