En la conferencia dedicada a la profundización de las nuevas “Normas del Dicasterio para la Doctrina de la Fe para proceder en el discernimiento de presuntos fenómenos sobrenaturales”, el prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, el Cardenal Víctor Manuel Fernández, aclaró algunas partes del documento “Reina de la Paz” sobre la experiencia espiritual en el santuario mariano de Herzegovina, escribe Vatican News.

“El permiso para el culto público en el santuario de Medjugorje significa que hay algo sobrenatural, que el Espíritu Santo está obrando en ese lugar, como en el caso de la Rosa Mística en Montichiari, incluso si no se declara la autenticidad sobrenatural de las apariciones. Algunos mensajes de la Virgen pueden ser sobrenaturales, mezclados con otros que no lo son. No decimos que el Espíritu actúe ‘por medio’, porque eso significaría afirmar lo sobrenaturalidad, sino ‘en medio’, y esto ya significa una acción especial del Espíritu en ese lugar”, así explicaba el cardenal Víctor Manuel Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, estos y otros detalles del documento “Reina de la Paz” sobre la experiencia espiritual en el pequeño lugar de Herzegovina, publicado la semana pasada, en la rueda de prensa dedicada a la profundización de las nuevas “Normas del Dicasterio para la Doctrina de la Fe para proceder en el discernimiento de presuntos fenómenos sobrenaturales” organizada por el Observatorio Internacional de Apariciones y Fenómenos Místicos de la Pontificia Academia Mariana Internacional (PAMI).

En su intervención, el purpurado argentino aclaró algunos puntos de los dos documentos, partiendo de las nuevas Normas que están vigentes desde el pasado 19 de mayo. Explicó el significado de los seis criterios en el caso de las supuestas apariciones, desde el Nihil Obstat hasta la Declaratio de non supernaturalitate, y quiso responder a la pregunta de muchos devotos de Medjugorje quienes se preguntaban ¿por qué el documento “Reina de la Paz” no siguió la propuesta de declarar la sobrenaturalidad de la “Comisión Ruini”? Fernández explicó que esta afirmación es “siempre posible”. Pero después de 43 años, durante los cuales “a los fieles nunca se les ofreció la explicación de los mensajes, que sin embargo fueron leídos y meditados”, a la espera de la revelación de la sobrenaturalidad, era importante asegurarles que estaban en la Iglesia, “acompañados y aprobado el culto público”. Hoy por hoy, “eso es suficiente para el Papa”.

A continuación, el cardenal señaló que las palabras de la Nota, “Dios está presente y actúa en nuestra historia”, dan sentido a todo lo que sigue, de modo que “es posible que Dios se haga presente de manera extraordinaria” a través de apariciones y milagros. Reiteró que el trabajo del Dicasterio para alcanzar estas normas fue “muy duro”. En estos 43 años, recordó, “ha habido 3.500 beatificaciones, que presuponen un milagro, y sólo 3 o 4 declaraciones de la sobrenaturalidad”. Sin embargo, hay dudas también sobre ellos, quiso señalar.

El riesgo de esperar demasiado tiempo para la declaración oficial sobre las supuestas apariciones, según el cardenal Fernández, “es que la gente vaya durante años sin orientación a los lugares de las supuestas apariciones, sin el permiso, y eso no es bueno. Los problemas muchas veces están relacionados con el hecho de que los supuestos videntes siguen vivos” y no se sabe cómo decirles que esperen con la revelación de las nuevas visiones antes de evaluar las anteriores. Y luego el peligro de decir: “Estos son los mensajes que Dios quiere, y transmitidos por medio de la Virgen”. Tienen un valor enorme: “¿Quién va entonces a ir a leer a los Padres de la Iglesia -se preguntaba Fernández-, que no dijeron que tenían las visiones?

Por ello, el prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe ha querido aclarar que la afirmación de la sobrenaturalidad “no es la enseñanza infalible del Papa y los fieles no están obligados a creerla. Por eso creemos que no es imprescindible”. Recordó que para muchos santuarios en el mundo, incluso nacionales, como de Nuestra Señora de Luján en Argentina, nunca ha habido una declaración de sobrenaturalidad, enfatizando que “nulla osta” significa tres cosas para Medjugorje. Primero, dar la paz a los fieles que saben que la Iglesia los acompaña ahora; En segundo lugar, el permiso para el culto público, y no solo para las peregrinaciones, y significa que ahora “se puede construir una iglesia o capilla con ese nombre” en todo el mundo. Y en tercer lugar, aclaraciones útiles para los fieles “para que los que leen los mensajes sean acompañados, y que hay aspectos que tienen que han de ser interpretados correctamente”. En el pequeño lugar de Herzegovina, los frutos espirituales eran importantes para el cardenal, pero también algunos mensajes. Confesó que le impresionó la devoción de Virgen de los Dolores de Chandavila en España, “donde el vidente sintió el beso y el abrazo de la Virgen”.

Por su parte, el padre Stefano Cecchin, presidente de la Pontificia Academia Mariana Internacional, recordó que desde su fundación en 1946, la PAMI “ha prestado especial atención al tema de las apariciones marianas que han marcado significativamente la historia de la Iglesia”. María que se aparece también a los no cristianos, portadora de diálogo entre las religiones e inculturadora del Evangelio. El mejor ejemplo es el de la Virgen de Guadalupe. También en Medjugorje, María se refiere al Evangelio, explicó. A continuación, destacó los problemas que han surgido en más de cincuenta años de investigación, que se pusieron de manifiesto en el Congreso Mariológico Internacional de 2020, y que están relacionados con la “falta de verdadero conocimiento de la doctrina católica de la Madre del Señor” que, como dijo san Pablo VI, es la clave “para una comprensión correcta del misterio de Cristo y de la Iglesia”. De hecho, el Concilio Vaticano II enseña que María es el “modelo de la Iglesia”.

Pero hoy, esta falta de conocimiento conduce, según el padre Stefano Cecchin, a un cisma entre la mariología y el pensamiento eclesiástico y una cierta Marianidad popular, la de muchos grupos y asociaciones, especialmente en las Américas, “que utilizan la imagen de María para difundir un mensaje y usos que no están de acuerdo con el mensaje del Evangelio, casi siempre basados en supuestas revelaciones privadas”. Y criticó “la multiplicación de la difusión de los fenómenos, visiones, profecías que utilizan la imagen de María para atacar al Papa, a la Iglesia, a las autoridades eclesiásticas, al Magisterio, a las instituciones con mensajes apocalípticos, no para crear esperanza en la victoria del “Inmaculado Corazón de María, sino para despertar miedo”.

Esta rueda de prensa fue organizada por el Observatorio Internacional de Apariciones y Fenómenos Místicos de la Pontificia Academia Mariana Internacional (PAMI) en colaboración con la Pontificia Universidad Antonianum, la Pontificia Facultad de Teología de San Buenaventura y la Pontificia Facultad de Teología Marianum.