El sábado 16 de marzo de 2024, se cumplieron exactamente 90 años desde la finalización de la construcción de la cruz en el Križevac y la celebración de la primera misa bajo esa cruz. Por este motivo, se realizó el rezo del Vía Crucis, dirigido por el fray Zvonimir Pavičić, párroco de Medjugorje, ante un gran número de feligreses y peregrinos.

Los feligreses aceptaron con alegría la idea del entonces párroco, fray Bernardin Smoljan, de construir una cruz en la colina de Šipovac (llamada así por los numerosos granados silvestres que crecen en ella), en conmemoración del 1900 aniversario de la pasión y muerte de Jesús (33-1933). Con un esfuerzo sin precedentes y donaciones, la cruz fue erigida en 1934. Desde la decisión de construir la cruz (21 de enero de 1934) hasta la finalización de su construcción, pasaron sólo 52 días. Y fue construida del 12 de febrero al 10 de marzo de 1934.

Después de eso, el párroco pidió al obispo Mišić que le permitiera bendecir la cruz en un día laborable, lo que el obispo aceptó con gusto. La cruz fue bendecida el viernes 16 de marzo de 1934. Hoy en día, Križevac es una parada indispensable para millones de peregrinos que llegan a Medjugorje de todo el mundo, y cada viernes por la tarde, feligreses y peregrinos realizan la oración habitual del Vía Crucis en el Križevac.

“Hoy celebramos el 90º aniversario de la construcción de la cruz en el Križevac y la celebración de la primera misa. La importancia de la cruz en la vida de esta nación se muestra por el tamaño de esta cruz y el sacrificio que hicieron nuestros antepasados para construirla. Está visiblemente por encima de la parroquia, lo que significa que confían toda la parroquia al amor misericordioso de Cristo y que confían en la fuerza, en la fuerza salvadora que la cruz lleva en sí misma. Este depósito de fe nos lo dejaron nuestros antepasados. Ella habla, incluso hoy, en cada subida al Križevac, en cada oración, se puede sentir la fe que tenían nuestros antepasados en que sólo en la cruz está la salvación”.

“Hoy celebramos el 90° aniversario, nuestros antepasados tal vez no sabían qué importancia alcanzaría este lugar, pero escribieron en las crónicas que sentían que este lugar sería un lugar de oración para toda la region, y ahora es mucho más amplio, es un lugar de oración para el mundo entero. Esta es la providencia de Dios, cuando el hombre construye con Dios, entonces Dios le da su bendición y acompaña al hombre en el camino de su vida. Quisiera invitar no sólo a los feligreses, sino también a todos los fieles a venir a este lugar, a orar, a hacer sacrificios y a unir su sacrificio con el sacrificio de Cristo, para que después de la cruz de su vida sientan el poder de la resurrección de Cristo“, dijo el párroco de Medjugorje, fray Zvonimir Pavičić, después de terminar el viacrucis.

En el Križevac también estuvo presente fray Jozo Grbeš, provincial de la Provincia franciscana de Herzegovina.

“En tiempos difíciles, la gente buscaba consuelo espiritual, y esta colina, el Križevac, en aquella época, en los años 30, era exactamente una expresión de esa espiritualidad. Es increíble lo que hizo la gente, porque esto es alto, el Križevac es alto, cargaron todo ese material con motivo del 1900 aniversario de la muerte de Jesús. Desde entonces hasta hoy, esta colina y esta cruz han sido una inspiración para generaciones, y creo que es nuestro deber transmitir esa espiritualidad, los sacrificios y la perseverancia de un gran amor a las generaciones venideras”, dijo fray Jozo Grbeš.

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