Con el tradicional desfile de Banderas, que portaban las delegaciones de los 19 países participantes, dimos inicio a este VII CONGRESO IBEROAMERICANO DE MÉXICO, en el que participaron 283 miembros, 42 sacerdotes y 17 servidores.

Fray Marinko Sakota, párroco de Medjugorje, nos envió “un saludo de corazón, dirigiéndonos con alegría unas palabras de amistad y nos recordó que María, la Madre de Jesús, es la misma persona que se apareció en Guadalupe, en Lourdes, en Fátima y en Medjugorje. Bajo los diferentes nombres con los que se presenta, ella ofrece la respuesta a los problemas con los que la humanidad se encuentra en un tiempo dado. Y en nuestro tiempo, esa es la paz. Y esto se ve claramente en Medjugorje: “He venido aquí como la Reina de la Paz y deseo enriqueceros con mi paz maternal”. (25.7.1990). Terminó su carta diciendo “que la paz y la alegría estén en todos vosotros y entre vosotros”. Y algo más: “No vivamos la paz y la alegría solamente por y para nosotros sino seamos las manos extendidas de María que lleguen hasta aquellas personas que no tienen ni paz ni alegría”.

Y, como cada año, las CONFERENCIAS de los padres nos instruyeron y completaron nuestros conocimientos sobre la espiritualidad de María.

El P. Inocencio Llamas, de Venezuela, hizo referencia al tiempo de dificultad que vivimos sin olvidar que también es tiempo de gracia. Nos advirtió de los peligros de la llamada “ideología de género” en concordancia con la existencia de un claro deseo de terminar con la familia, destruir la cristiandad en el mundo y a la Iglesia Católica. Nosotros debemos ser Luz del mundo, no hay otra fuerza que pueda vencer al mal, solo la Iglesia, y recordemos que “nosotros somos esa Iglesia” guiada por Nuestra Madre a través de sus Mensajes.

P. Francisco Á. Verar, de Panamá, nos transmitió la importancia de la pedagogía materna mediante la cual nuestra Madre, a través de una auténtica “Escuela” nos guía hacia la santidad de la iglesia por medio de los mensajes de la Gospa y a través de la oración que, nos recordó, puede ser:

  • personal
  • parroquial (Rosario, Exposición del Santísimo, Eucaristía, catecismo o testimonio)
  • familiar (hijos, amigos o matrimonios) vocal, meditación y contemplación

Siempre es enriquecedor escuchar las cátedras del P. Rafael Zacarías, de México, quién es un convencido del amor inconmensurable que nuestra “Mamá”, -como a él le gusta llamar a nuestra Madre- siente por cada uno de sus “queridos hijos”. Él, en repetidas ocasiones, nos ha externado que el amor maternal de María, es el mismo Amor de Dios, por ello al sabernos amados y protegidos en el hueco de los brazos de Nuestra Madre Santísima nada debemos temer… Nos compartió similitudes y enlaces entre las Apariciones de la Virgen María en el Tepeyac y en Medjugorje, cada una en el esquema de amor, consuelo y esperanza que ha querido dar en cada época, tanto a los indígenas como al pueblo croata y al mundo entero en la actualidad. Casi al término de su conferencia nos hizo contemplar la mirada de Amor Materno de Santa María de Guadalupe en una estampa con la que él nos obsequió, este ejercicio fue un deleite para el alma de quienes abrieron el corazón a Nuestra Mamá.
Por otra parte, tuvimos el gran regalo de contar con la presencia de Fray Jozo Grbes, croata, que ejerce su misión como provincial en Estados Unidos, y que vino en representación de los franciscanos, nos ofreció conmovedoras palabras centradas en la paz y la reconciliación como deberes prioritarios de los cristianos, a ejemplo de María quien, como portadora del Mensaje de Paz, es la única capaz de reconstruirnos y de devolvernos a cada uno nuestra dignidad perdida.

Otra gran bendición fue la de poder contactar, en directo, a través de Skype, con el vidente, Jakov Colo, quien por medio de Filka (traductora y miembro del patronato de la Fundación) que hizo de enlace, nos presentó la Asociación “Manos de María”. Una vez más constatamos el don del amor y la caridad en los videntes de Medjugorje. Fruto de este amor inspirado por Nuestra Madre Jakov nos invitó a colaborar con oraciones, donativos y nos ofreció la oportunidad de abrir en nuestros países extensiones de este bello apostolado, cumpliendo la petición que La Reina de La Paz nos hace de ser sus manos extendidas.

Por último, el P. Dr. Israel Mendoza, de Tinoco, nos platicó sobre el Acontecimiento Guadalupano. Como Vicario del Santuario Diocesano de la Quinta Aparición de la Virgen de Guadalupe, ha realizado estudios minuciosos sobre la Virgen de Guadalupe y San Juan Diego. Nos compartió como el acontecimiento Guadalupano es una realidad teológica y un misterio de fe de la encarnación de Cristo en el pueblo mexicano en particular y en la Iglesia en general porque es la manera mediante la cual Dios ha querido hacerse presente en la vida del pueblo mexicano por medio de la Morenita del Tepeyac y del indígena San Juan Diego.

También hubo un tiempo dedicado a los TESTIMONIOS PERSONALES, en esta ocasión fueron realmente excepcionales. 

Por una parte, el Dr. Elio Alvarenga, de Honduras, nos ofreció su testimonio de vida, desde que era un pobre niño campesino hasta que guiado por Nuestra Señora, ha llegado a fundar en su país la Universidad Maria Reina de La Paz de la cual es rector. El Dr. Albarenga ha recibido a lo largo de su vida numerosos reconocimientos académicos pero nos confesó que el más importante, es el de diácono, el que más se le tendrá en cuenta cuando vaya al cielo.

P. Alfonso Romero, de México, nos compartió con gran emoción la impresionante experiencia que vivió de la Madre de Dios durante su primera estancia en Medjugorje.

Y, finalmente, cabe destacar el espontáneo testimonio de Sor Ana Luisa Montiel, de México, mejor conocida como “Sor Medjugorje”, quien nos contó algunas vivencias en su largo caminar de la Mano de la Reina de La Paz difundiendo la espiritualidad de Medjugorje, desde 1985, con la guía del P. Tiberio María Munari, fundador de los Grupos Oración y Centros de Paz en la República Mexicana.

La FUNDACIÓN CENTRO MEDJUGORJE, estuvo representada por Oriol Vives, L.Miguel Onieva, Filka Mihalj y Cristina Manso, quienes expusieron la labor que lleva a cabo anualmente la Fundación Centro Medjugorje en todos los países de habla hispana.

El equipo coordinador de México deleitó y sorprendió a los invitados con una muestra de música de mariachis, a cuyas voces se unieron algunos espontáneos y animados congresistas.

Cada día tuvimos la oportunidad de poder estar unidos en un clima de oración por medio del rezo de laudes (P. Edgar Baizabal, de México; Fray Michael della Penna, de Guatemala; P. Marcelino León, de México) de las Eucaristías (P. Rafael Zacarías, México; P. Inocencio Llamas, Venezuela; P. Alfonso Romero, México y P. Aldegundo Luna, México) y de la Adoración nocturna (P. Rafael, Zacarías; P. Jozo Grbes, Estados Unidos y Mons. Rogelio Esquivel EEUU/Puerto Rico), sin olvidar el rezo del Santo Rosario y de la Coronilla de la Divina Misericordia, que fueron guiados por miembros de las distintas delegaciones.

En todas las celebraciones religiosas hemos contado con el Ministerio de Música integrado por jóvenes de la Comunidad Magnificat de Panamá y otros músicos mexicanos; debido a esta convivencia fraternal, ha surgido en México la inquietud que, a través de dos bienhechores, Adrian y Mauricio, este año estos jóvenes podrán asistir al Festival de la juventud en Medjugorje.

El último día, a las 13:00h., en el Templo Expiatorio de la Insigne Basílica de Santa María de Guadalupe, tuvo lugar la Misa de Clausura del Congreso oficiada por el P. Patricio Romero quién nos regaló una bella homilía. Al finalizar, como buenos peregrinos del Tepeyac, las delegaciones hicieron un recorrido por el Santuario Guadalupano, sin dejar pasar la oportunidad de alzar la mirada y el corazón a Nuestra Madre del Cielo en la Sagrada Imagen de la Tilma de San Juan Diego.

Destacamos de estos días importantes frutos, el más significativo, por gracia de Dios y para alegría de María, la presencia de 38 sacerdotes que vivieron los I Ejercicios Espirituales para Sacerdotes María Reina de la Paz de Iberoamérica. También la cuantiosa asistencia de laicos y religiosos/-as provenientes de distintos países, culturas y costumbres, tal y como sucede en Medjugorje experimentándose un ambiente de comunión, alegría y solidaridad.

Finalmente, queremos expresar nuestro AGRADECIMIENTO.

Somos amorosamente privilegiados quienes nos hemos congregado en torno a Santa María de Guadalupe -Madre del Verdadero Dios por quien se vive- y de la Reina de La Paz. Sabemos que ha sido inmenso el deseo y mayor el esfuerzo de ustedes al venir de tierras lejanas para estar con la Morenita del Tepeyac participando del VII Congreso Iberoamericano María Reina de La Paz.

No cabe duda de que sentimos fuertemente la petición de Nuestra Madre y que hemos sido convencidos por la Virgencita de Guadalupe para participar en este Encuentro.

-Gracias a Dios porque por debido a Su Providencia nos hemos podido reunir tantos hijos de la Reina de La Paz.

-Gracias a María Nuestra Amada Gospa por mirar a sus hijos en América y España.

-Gracias a los Franciscanos de la Parroquia de Santiago Apóstol y a los videntes.

-Gracias a la Fundación Centro Medjugorje, por el gran esfuerzo de congregar a los países de habla hispana y por ser el enlace con el Santuario de Medjugorje.

-Gracias a ti, querido hermano en Cristo, por haber dicho sí a la Reina de la Paz en este VII Congreso Iberoamericano.

 

¡Gracias a todos por haber respondido a Su Llamado!

Fraternalmente

Comité Organizador en México 

 

 

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