Señor Jesús,  Tú eres del Pan de la vida: solamente Tú Señor, eres la verdadera comida y la verdadera bebida. Tu Cuerpo y Tu Sangre, sanan nuestras almas y nuestros corazones y nos convierten  en Tu Cuerpo y Tu Sangre. Haz que siempre tengamos hambre y sed de Ti, para que podamos vivir como los hijos de la luz.

 

Señor, gracias por el don de Tu Presencia en medio de nosotros. Danos unos ojos y un corazón que sepan reconocerte en el Santísimo Sacramento del Altar.

Señor Jesús,  danos Tu Espíritu de la vida, de la luz, de la verdad y del amor , para que podamos amarte a Ti y a los hermanos que no han conocido Tu Misericordia.

 

Señor de la vida y de la paz, te adoramos. Jesús,  Tu Palabra es la alegría del corazón y la luz del alma. Dirige nuestros pasos según Tu Santa Voluntad Señor.

Jesús,  te alabamos y te bendecimos,  danos la sabiduría del corazón,  el camino de la humildad y de  la paz.

Señor  Jesús ,  que Tu Corazón Divino sea nuestra fuerza en la lucha, la luz y la guía en las tinieblas, el refugio seguro en la debilidad.

 

Oh Dios, que en este admirable Sacramento nos dejaste el Memorial de Tu Pasión,  te pedimos nos concedas venerar de tal modo los sagrados misterios de Tu Cuerpo y de Tu Sangre,  que experimentemos constantemente el fruto de Tu Redención,  Tú que vives y reinas, por  los siglos de los siglos. Amén

 

FRA. FRANCESCO RIZZI

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