Queridos congresistas,

Como bien sabéis, a veces estamos sujetos a imprevistos que nos obligan a aceptar las circunstancias tal y como se nos presentan, así es que con gran consternación, hemos recibido la noticia de que nuestro querido padre Danko Perutina no podrá acompañarnos en esta ocasión durante la celebración del IV Encuentro de Lima, puesto que -como muchos de vosotros sabréis- desde hace muy pocos meses desempeña su labor pastoral en una nueva parroquia que, aunque cercana a Medjugorje, le hace imposible la movilidad por diversos motivos en las fechas previstas. Es por ello, que no nos queda más remedio que aceptar esta baja tan importante en la celebración de nuestro congreso.

Pero como María nunca nos deja solos, y siempre es generosa, tenemos al mismo tiempo la dicha de poder comunicarles que, desde Medjugorje, nos llegará otro padre no menos querido por todos los que amamos y conocemos la espiritualidad de Medjugorje, el padre Marinko Sakota quien desde hace poco es el nuevo párroco de la iglesia de Santiago, un fraile completamente ungido por el Espíritu Santo del que igualmente esperamos recibir maravillosas enseñanzas, ánimos y empuje en nuestra tareas.

Creemos, por tanto, que solamente podemos dar gracias a Dios y a la Virgen porque demuestra lo que nos quiere a nosotros y a toda Iberoamérica. Estemos, por tanto, felices, aunque echemos muchísimo de menos a fray Danko. Y preparémonos con gran alegría para el encuentro con el padre Marinko a quien no podemos dejar de agradecer desde aquí su disponibilidad, su tiempo y dedicación al haber aceptado esta misión tan lejana e imprevista para él. Que María les bendiga a todos y nos siga guiando con su bondad y ternura en este tiempo de Adviento en el que permanecemos unidos en la Esperanza.

Oriol Vives

Presidente FUNDACIÓN CENTRO MEDJUGORJE

Recuerden que para darse de alta en el Congreso deben inscribirse. Les rogamos, que si están interesados no retrasen la inscripción puesto que en la convocatoria del año anterior, no todos pudieron asistir por falta de plazas.