Transmitimos íntegramente el mensaje del provincial de la Provincia Franciscana de Herzegovina de la Asunción de la Santísima Virgen María, fray Jozo Grbeš, con motivo de la solemnidad del Nacimiento del Señor 2025.

«La luz verdadera, que ilumina a todo hombre, vino al mundo.» (Jn 1,9)

Queridos hermanos:

La luz es la “moneda” fundamental que utiliza nuestro universo para transmitir energía de una realidad a otra. En todas sus formas —visibles e invisibles— lo impregna todo. ¡Y nos alcanza a todos!

La vida comienza cuando la luz toca la tierra. Desde el primer amanecer hasta la puesta del sol, los seres humanos estamos biológicamente programados para depender de la luz. Ella regula nuestros ciclos de sueño, influye en nuestra productividad y, sencillamente, sin ella no podemos vivir. Nuestra dependencia de la luz está inscrita en nuestro ADN y, por ello, constituye el elemento más esencial de nuestra vida cotidiana. El sol recorre cientos de miles de kilómetros para llegar hasta nosotros y hacer nuestra vida luminosa, bella y saludable. Con su fuerza, escribe la vida.

¡La luz es símbolo de esperanza y de la presencia divina!

La luz ha llegado al mundo. ¡En un Niño! ¡En el Hijo! Él mismo afirma que es la luz. Y quien lo sigue “no caminará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” (Jn 8,12). Quienes lo siguen llegarán a ser como Él, luz del mundo. “Ustedes son la luz del mundo… Que brille así su luz delante de los hombres, para que vean sus buenas obras y glorifiquen a su Padre que está en los cielos” (Mt 5,14–16). Sí, Él mismo es la luz y “no hay tinieblas en Él… Si caminamos en la luz, como Él está en la luz, tenemos comunión unos con otros” (1 Jn 1,5–7).

La Navidad es un acontecimiento de luz. El comienzo de una nueva era. Estamos llamados a ser personas de luz: allí donde haya tinieblas, llevar la luz. ¡A cualquier oscuridad, a cualquier persona, en cualquier situación! Así nos convertimos en testigos de la Luz. Si el sol, tras un largo viaje, ilumina todo cuanto alcanza, y si nosotros estamos llamados a ser apóstoles de la luz, ¿qué puede impedir que así sea?

¡Eso es la Navidad! ¡Feliz y bendecida!

Fray Jozo Grbeš
Provincial