La celebración del 26º aniversario de la emisora ​​de radio Mir Medjugorje comenzó con el programa de oración vespertina en la iglesia de Santiago Apóstol, donde fray Danko Perutina, presidente de la junta directiva del Centro Informativo Mir Medjugorje, celebró la Santa Misa por todos los empleados y colaboradores de la radio ​​Mir fallecidos, con la concelebración del primer director de radio ​​Mir, fray Miljenko Mića Stojić y otros nueve sacerdotes.

En su sermón habló de la conciencia, del amor, de las crisis actuales, de la falta de fe…

Si elegimos a Dios, somos cada día más amados, y el que es más amado es cada día más feliz. El amor, por así decirlo, nos empuja, nos pide llegar más lejos… Aunque hay constantes obstáculos y dudas que dificultan la elección. Y un hombre es mejor cuanto más positivas y bellas sean sus elecciones, porque cada día tenemos que decidir por esto o aquello, y cuanto más decidimos por el bien, mejores seremos cada día. Y nuestra tarea es hacer cada día un bien más y un pecado menos, porque el amor nos hace avanzar”, dijo fray Danko, subrayando que “más de 50 millones de peregrinos han pasado por Medjugorje, porque las palabras pronunciadas por la Virgen fueron dichas con amor”.

Fray Danko dijo que la Virgen en Medjugorje nos llama a la conversión, a la paz, al ayuno, a la oración, a la adoración de Jesús, a la Santa Misa cada domingo, y añadió que los frutos de Medjugorje son grandes.

“El mundo entero se alimenta de los frutos de Medjugorje. Aquí nacieron y dan testimonio más de 640 vocaciones sacerdotales. Se han celebrado más de un millón de misas, han pasado por Medjugorje más de cincuenta millones de peregrinos… Y el peregrino sigue viniendo buscando a Aquel por quien dice la Virgen ‘hagan lo que él les diga’. Esta noche en esta santa misa, mientras oramos por los empleados fallecidos de nuestra radio, mientras oramos también por nuestros colaboradores fallecidos, le pediremos al Señor que nos dé fuerza, para que podamos seguir difundiendo la palabra de Dios y de la Virgen. Y abrir nuestros ojos, corazones y almas para que podamos reconocer en cada momento de nuestra vida cuál es la voluntad de Dios. Pongan primero la voluntad de Dios, porque cuando Dios es primero, entonces todo está en su lugar”.

“Señor, queremos ser tuyos, séllanos nuevamente con el don de tu amor, el Espíritu Santo.”, concluyó fray Danko.