Ayer todos quedamos sorprendidos por la triste noticia en la radio. Después de una larga enfermedad, nuestro colega y amigo Stipe Ćavar falleció el lunes 4 de diciembre por la tarde a la edad de 65 años.

Stipe nació en Krehin Gradac en 1959. Completó la escuela primaria y secundaria en Čitluk. En 1978 se graduó en el Departamento de Electrónica de la Facultad de Ingeniería Eléctrica de Sarajevo.

En 1993, Stipe trabajó como primer empleado del Centro de Información Mir Međugorje. Enviaba los mensajes de Nuestra Señora por fax a direcciones de todo el mundo cada 25 del mes, luego vino un milagro técnico llamado Robofax, algo intermedio entre una máquina de fax e Internet, y luego Internet. Stipe puso en uso todos estos instrumentos para enviar el mensaje y las noticias de Nuestra Señora desde Medjugorje a todo el mundo en siete idiomas.

Marija Dugandžić, pensando en su colaborador más cercano y amigo, escribió lo siguiente: “Cuánto conocimiento y coraje tuviste, el hecho de que fueras el primero en Bosnia y Herzegovina en crear un sitio web, el mismo que sigue vigente hoy en día, dice mucho de ti. Es imposible enumerar todo lo que has hecho aquí. Una cosa es segura: edificaste una base tan buena que otros podrán seguir construyendo pisos sobre esa casa. No tenías miedo de nada, nada era insuperable, imposible cuando se trataba de lograr una meta: y tu meta era enviar las invitaciones maternales de Nuestra Señora a todo el mundo. ¡Hoy es algo completamente natural y nada exigente, pero en aquél momento era igual a un milagro! Había que tener ese coraje y ese gran conocimiento, y tú tenías ambas cosas. Muchas veces te encontraba en la oficina ‘hablando’ con la computadora. Me paro, miro, no entiendo nada, te admiro. Debo confesarte ahora: muchas veces no podía ni entenderte ni seguirte, no fui sólo yo. Por eso te pido ahora: ¡perdóname! Sin embargo, estarías tan benevolentemente enojado al intentar explicarme a mí y a otros cómo se debe hacer todo esto, avanzar siempre, para que el mensaje de Nuestra Señora llegue a todos los rincones de este país”.

Todo lo que hizo, lo hizo con tanto celo, dedicación, fervor y responsabilidad según su propia conciencia. Con su actitud interior hacia el trabajo, desarrolló hasta el final todos los talentos que Dios le dio. En todo esto, era excepcionalmente un alma buena, un buen hombre. Cuando fue necesario proteger con trabajo y hechos este proyecto y anhelo de Nuestra Señora, no tuviste miedo de exponerte a ti y a tu familia. No temisteis a nadie, sólo al Señor.

En 1997 no tuvo miedo de emprender un nuevo proyecto: la creación de la emisora de radio Mir Međugorje. Ni siquiera en 1999, cuando creó su propio servidor web que permite la transmisión de un programa de radio al mundo y la transmisión en vivo de un programa de oración vespertino en vídeo desde la Iglesia de Santiago a través de Internet.

“Eran increíbles las ganas, la voluntad, el entusiasmo… en salas pequeñas y con goteras. Cuando venía gente de los grandes centros y emisoras de radio del mundo, no podían creer que un programa de esa zona estuviera saliendo al mundo con tanto amor. Se trabajó, se buscó una solución, se construyeron habitaciones, se construyeron sistemas de sonido… Todo dentro de las posibilidades que teníamos entonces, que no eran grandes”, dijo Stipe Ćavar sobre aquellos comienzos, visitando la estación de Radio Mir Međugorje, que él mismo fundó y así lo dijo con motivo de su vigésimo cumpleaños.

Stipe siempre dijo que estaba al servicio de Nuestra Señora con el objetivo de difundir la paz en el mundo, llamando a todos a la conversión, y muchos se convirtieron gracias al hilo de Stipe a través del cual el programa de oración de la tarde llegó a todos los rincones del mundo.

Stipe Ćavar también publicó el libro “Los primeros meses de las apariciones en Medjugorje: un diario personal sobre los acontecimientos externos con la reflexión actual sobre ellos”.

Además del Centro de Información Mir Međugorje, desde 1994 Stipe Ćavar también trabajó en el Instituto de Educación de la República Croata de Herceg-Bosna como consultor en informática y electrotecnia y como profesor de informática en la escuela secundaria de Čitluk.

Amaste a la Virgen desde niño, la obedeciste y la respetaste como a una madre. ¡Él hizo todo por ella! Querido Stipe, hiciste mucho en tu vida, te fuiste con las manos ocupadas y ahora puedes hacer aún más: seguirnos en el camino donde fuimos amigos y compañeros. ¡Que su alma descanse en paz!

¡Tus colegas!