Queridos Hijos, Dios os ha dado la gracia de vivir y de custodiar todo el bien que hay en vosotros y alrededor de vosotros, y de alentar a otros a ser mejores y más santos, pero Satanás no duerme, y a través del modernismo os desvía y os conduce por su camino. Por eso, hijos míos, en el amor hacia mi Corazón Inmaculado, amad a Dios sobre todas las cosas y vivid Sus Mandamientos. Así vuestra vida tendrá sentido y la paz reinará en la Tierra. ¡Gracias por haber respondido a mi llamada!