Queridos hijos, hoy os invito a todos a despertar vuestros corazones al amor. Salid a la naturaleza y ved cómo está despertando y esto os ayudará para que podáis abriros a Dios Creador. Deseo que despertéis el amor en vuestras familias, para que donde haya inquietud y odio, reine el amor; y si hay amor en vuestros corazones, también habrá oración. Y no olvidéis, queridos hijos, que Yo estoy con vosotros y os ayudo con mi oración para que Dios os dé la fortaleza para amar. Os bendigo y os amo con mi amor maternal. Gracias por haber respondido a mi llamada.