Gracias por haber respondido a mi llamada. Queridos hijos, convertíos vosotros, los de la parroquia. Este es mi segundo deseo. De ese modo ayudaréis a que se conviertan todos los que vienen aquí.
Gracias por haber respondido a mi llamada. Queridos hijos, convertíos vosotros, los de la parroquia. Este es mi segundo deseo. De ese modo ayudaréis a que se conviertan todos los que vienen aquí.