Queridos hijos, vosotros sabéis que os he prometido un oasis de paz pero no sabéis que junto al oasis está el desierto, donde Satanás acecha a cada uno de vosotros buscando tentaros. Queridos hijos, solamente con la oración podréis vencer toda influencia satánica en el lugar donde vivís. Estoy con vosotros pero no puedo privaros de vuestra libre voluntad. Gracias por haber respondido a mi llamada.