La primer conferencia del cuarto día del XV Congreso Iberoamericano la dio el P. Inocencio Llamas, y el tema del cual habló fue “Razones para la esperanza”, acompañando el año jubilar y de gracia que la Iglesia está viviendo. Comenzó haciendo una oración de sanación, para poder disponer el corazón y la mente de la mejor manera, acompañado musicalmente por el P. Diego González y Yamid Cruz.
“La Virgen dijo que sin nosotros no puede llevar a cabo el plan que tiene, y también ha dicho que los sancerdotes son sus hijos predilectos. Que la comunidad que ora por sus sacerdotes se llena de bendiciones, que los perdonemos y no los juzguemos. Este es el año en el que el Papa Francisco nos ha invitado a ser peregrinos de la esperanza. Debemos tener esperanza, porque nadie pueda dar lo que no tiene”, comenzó diciendo el P. Inocencio.
“Debemos abrir el corazon a Jesús y a la Gospa para que quite todo lo que no sea esperanza. Debemos tener esperanza por tres razones: La primera es porque Dios es omnipotente, la segunda es porque Dios nos ama inmensamente, y la tercera es porque Dios es fiel a sus promesas. Dios es nuestro Padre que todo lo puede, y si permite una prueba en nuestra vida, antes de permitirlo ya tiene un salida preparada a esa prueba. Dios ama a su Hijo inmensamente y Jesucristo nos ama a nosotros como Dios lo ama a Él: ¡Inmensamente!”.
“No dudemos de su amor ante la prueba. Y si dudamos, debemos ponernos de rodillas ante un crucifijo, mírarlo y dudemos si podemos. Ya sabemos que para los que aman a Dios todo es para bien. Por ello hemos de alabar a Dios porque es muestra de confianza alabarlo, aún cuando nos sentimos débiles, incluso cuando pecamos. Dios lo permite para que seamos humildes”, reflexionó.
“Oremos por aquellos que nos dañan, para que el Señor saque bien del mal. Dios es fiel a sus promesas. Somos vencedores por la Gracia del Señor, pero debemos confiar y abandonarnos. No existe la casualidad. Todo lo que ocurre tiene una causa, aunque no la entendamos. Dios interviene en todo, aun respectando nuestra libertad. Todo es providencia, no debemos desanimarnos”.
“No existe la oración con fe, humildad, sin rencor y con perseverancia, que no sea escuchada. La Virgen nos repite siempre: ¡Oren, oren, oren! Debemos comprender que nuestra vida la lleva el Señor por medio del Espíritu Santo. No le demos más importancia al mal que al bien, ni al pecado que a la misericordia. ¡Ya el mal está vencido! ¡Seamos optimistas! Dios tiene un plan para ti. Descubre que plan tiene Dios para ti! Las apariciones de la Vírgen forman parte de este plan. Es algo sumamente importante y tu eres parte de su plan!”.
“Medjugorje es para toda la Iglesia. Este mundo lo cambiara el Espíritu Santo, pero no trabaja solo. Los planes de la Virgen son planes de paz. Pongamos nuestro grano de arena para la victoria del corazon Inmaculado de María y participemos del plan que Dios tiene desde toda la eternidad. La esperanza tambien está basada en la palabra de Dios y no dejará de cumplirse ni una coma, ni una tilde de la palabra de Dios”, con estas palabras finalizó su conferencia el P. Inocencio Llamas.