Medjugorje – Virgen de Medjugorje

Misa solemne por el 43° Aniversario de las Apariciones en Medjugorje

Hoy, en el 43º aniversario de las apariciones de la Virgen en Medjugorje, además de numerosos peregrinos de Croacia y Bosnia y Herzegovina, también hay grupos de peregrinos de: España, Portugal, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia, Rumania, Francia, Italia. , Alemania, Polonia, Austria, Hungría, Ucrania, Lituania, Irlanda, Argentina, Colombia, Costa Rica, México, Estados Unidos, Brasil, Corea, China y Nueva Zelanda.

A lo largo del día, como en los días previos al aniversario, muchos feligreses y peregrinos estuvieron en todos los lugares de oración de Medjugorje, así como en las filas para confesarse, y durante el día se celebraron 20 santas misas.

La misa central a las 19.00 horas estuvo presidida por el ex vicario parroquial de Medjugorje y hoy guardián del monasterio franciscano de Tomislavgrad, fray Bože Milić. Entre los concelebrantes estaban el provincial y vicario de la Provincia franciscana de Herzegovina, fray Jozo Grbeš y fray Miro Šego, el párroco de Medjugorje, fray Zvonimir Pavičić, y otros 364 sacerdotes.

Al comienzo de la Santa Misa, fray Bože Milić llamó a orar por la paz en el mundo, por la paz en las familias, especialmente por la paz en nuestros corazones.

“La paz se encuentra en el corazón humano o no se encuentra en ninguna parte. En el corazón humano comienza la paz o se hace la guerra. Que esa sea nuestra oración esta noche. Podemos expresar nuestras oraciones y necesidades personales al Señor a través de la Santísima Virgen María. Y eso es bueno y por eso estamos aquí. Cantemos con nuestro corazón ante el Señor y la Virgen. Él nos entiende, sabe lo que necesitamos y nos permite expresar lo que necesitamos y por qué vinimos aquí, pero aquí estamos primero reunidos como comunidad, como Iglesia, y que nuestras intenciones sean grandes y amplias. Oramos por la Iglesia, oramos por el mundo entero…”, invitó al inicio de la Santa Misa fray Bože Milić, quien en su sermón habló sobre el poder y la importancia de la oración, de la que nos habla la Virgen.

“Y este año nos reunimos en torno a la Reina de la Paz, como lo hemos estado haciendo durante más de 40 años. También este año queremos acompañarla a Ella, Madre y Reina de la Paz, orando por nosotros y por el mundo entero. Damos gracias al Señor que nos envía a su Madre para estar con nosotros en estos tiempos de grandes cambios. Ella nos comprende mejor y puede ayudarnos mejor, porque sabe lo que es bueno para nuestro tiempo y lo que hay que hacer. La Virgen ha sido nuestro consuelo y refugio todos estos años. Ella sigue lo que sucede con gran amor y preocupación y participa activamente en nuestra vida y en el mundo entero. Ella observa atentamente lo que se necesita en el mundo de hoy”, dijo fray Bože Milić, añadiendo que la Virgen también ve nuestras necesidades, las pequeñas cosas cotidianas y sinples, así como las necesidades en ocasiones especiales.

“Estamos agradecidos porque aquí todos encontramos comida que agrada a todos los gustos, comida adecuada para cada alma que busca, que tiene sed… aquí cada uno obtiene lo que los corazones honestos buscan. Alguien busca consuelo, alguien busca curación, alguien busca un sentido, alguien busca paz, alguien busca un nuevo comienzo, alguien busca una manera de continuar a pesar de todos los problemas, y María viene a nosotros y nos guía con claridad y seguridad. Aquí la mano maternal y de Dios nos abraza a todos, nos anima y nos dice que confiemos en la providencia de Dios y que así las cosas irán por el buen camino, nos dice que nos entreguemos a la voluntad de Dios siguiendo el ejemplo de Aquella que lo hizo de forma perfecta y recorrioel camino completo”, afirmó fray Boze, subrayando que mientras expresamos nuestras oraciones y necesidades, “aquí decimos primero que sea según tu palabra, porque eso es lo mejor para mí, para nosotros y para el mundo entero”.

“Nosotros los creyentes sabemos que es mejor cuando la voluntad de Dios se hace a través de nosotros, no que nosotros los creyentes hagamos algo, sino que la voluntad de Dios se hace a través de nosotros”, dijo Fray Boze, explicando cómo la Virgen nos anima a entrar con valentía en la relación con el Señor.

“Y tenemos que dar un paso. Nosotros también debemos decidir empezar a orar. Nosotros también debemos decidir vivir sacramentalmente. Nosotros también tenemos que hacer cola delante del confesionario. Somos nosotros los que tenemos que dar quizás un paso decisivo con la ayuda de Dios, porque somos seres libres. Somos personas de libre albedrío, capaces de la relación y comunicación con Dios. La Virgen nos anima a ser valientes aquí, a no tener miedo. Este no es el momento de tener miedo. Este no es el momento de dudar. Este es el momento del coraje, de la determinación, cuando se les pide a los creyentes que permitan que Dios actúe en sus vidas. Este es el momento en que Dios nos muestra a través de María lo que sucede cuando una persona permite que Dios obre en su vida. Luego las cosas van encajando, luego los acontecimientos siguen su curso”, dijo fray Bože y explicó que cuando permitimos que Dios obre en nuestras vidas, no estaremos libres de problemas, preocupaciones, enfermedades, pero en todo esto sentiremos y experimentaremos la ayuda de Dios y veremos una feliz solución.

 

Después de la Santa Misa, tuvo lugar una hora de adoración a Jesús en el Santísimo Sacramento en el altar exterior, que continuó en silencio hasta las 7 de la mañana dentro de la iglesia.

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