Toda la comunidad eclesial estuvo presente y esperaron expectantes para entrar a la parroquia. Ya el día anterior se realizó una vigilia para agradecer a Dios por la reconstrucción del templo.
Un momento muy emocionante fue cuando monseñor Ricardo Ezzati, Arzobispo de Santiago, golpeó las puertas del templo con su báculo tres veces y se abrieron para que las personas pudieran entrar con coloridas banderas. Rápidamente los feligrreses repletaron el lugar, ya que todos querían participar de la misa que se iba a celebrar.
Para la comunidad era muy significativo el hecho de inaugurar la iglesia, ya que había sido muy doloroso y triste su destrucción. Este templo era un punto de encuentro, donde se reunían los integrantes de las 7 capillas que forman parte de la parroquia.
La eucaristía fue presidida por monseñor Ricardo Ezzati y fue concelebrada por el Vicario General y Moderador de la Curia, Padre Rodrigo Tupper; el Vicario de la Zona Oeste, padre Galo Fernández y el párroco Juan Carlos Veas, entre otros sacerdotes.
Monseñor Ricardo Ezzati en su homilía dijo: “Dios nuestro Padre nos ha abierto la puerta de su casa y nos acoge con amor” y recordó la reconstrucción del templo de Jerusalén. También destacó que ésta es la primera parroquia que se inaugura durante el Año de la Fe. “Me alegro inmensamente poder bendecir el nuevo templo ya levantado para la comunidad, es un lugar para encontrarse con Dios y poder salir con el corazón renovado”.
El Vicario General, padreRodrigo Tupper, explicó que fue posible reconstruirla con el apoyo los habitantes del lugar, también de otras comunidades y con recursos de la Iglesia. “Es un regalo de Dios que hoy día podamos contar con la bendición de nuestro Arzobispo en la reinauguración de este templo, porque con el terremoto se cayó prácticamente entero y fue muy duro porque es un era relativamente nuevo. Fue un proceso espiritual para la comunidad muy difícil, por lo que aquí hubo un trabajo no sólo reconstrucción material sino que también de animarla a continuar”, sostuvo.
Miembros de la comunidad parroquial expresaron su alegría. “Para nosotros significa mucho, es muy emocionante este día porque trabajamos mucho para reconstruirla. Hicimos rifas, vendimos empanadas y bingos y hoy se ve el fruto de eso”, expresó María Fuentes, miembro de la Capilla San Alfonso.
Eliana Ortíz, también agente pastoral, compartió: “Cuando se cayó la parroquia no lo queríamos creer, porque habíamos pasado tantas cosas acá. Nosotros tenemos nuestra capilla, pero las cosas grandes se hacen todas acá porque nosotros somos muy unidos”.
En la eucaristía hubo momentos muy significativos como cuando monseñor Ezzati ungió las paredes del templo con crisma en los 4 puntos cardinales. También cuando se colocaron reliquias de Santa Teresa de los Andes bajo el altar, las que fueron cubiertas con baldosas por dos trabajadores que habían participado en la construcción de la iglesia. Además del envío que hizo el Arzobispo de Santiago a los jóvenes de la pastoral juvenil que participarán el sábado 20 de la peregrinación al Carmelo de Los Andes.
Al finalizar, el párroco Juan Carlos Veas agradeció a todas las personas que ayudaron en la reconstrucción y sobre todo destacó la fe de la comunidad.
Fuente: Comunicaciones www.iglesiadesantiago.cl
Santiago, 20/10/2012