Medjugorje – Virgen de Medjugorje

9º Día de Cuaresma – Viernes, 14 de marzo

Oremos por todos los jóvenes del mundo  

“¡Queridos hijos! También hoy los invito al ayuno y a la renuncia. Hijitos, renuncien aquello que les impide estar más cerca de Jesús. De manera especial los llamo: Oren, ya que únicamente con la oración podrán vencer la propia voluntad y podrán descubrir la voluntad de Dios aun en las cosas más pequeñas. Con su vida cotidiana, hijitos, ustedes darán ejemplo y testimoniarán de si viven para Jesús o contra Él y Su voluntad. Hijitos, deseo que lleguen a ser apóstoles del amor. Según el amor que tengan, hijitos, se reconocerá que son míos. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”

(Mensaje del 25 de marzo de 1998)

Recemos el Credo Niceno-Constantinopolitano

Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
de todo lo visible y lo invisible.

Creo en un solo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros lo hombres,
y por nuestra salvación bajó del cielo,
y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen,
y se hizo hombre;
y por nuestra causa fue crucificado
en tiempos de Poncio Pilato;
padeció y fue sepultado,
y resucitó al tercer día, según las Escrituras,
y subió al cielo,
y está sentado a la derecha del Padre;
y de nuevo vendrá con gloria
para juzgar a vivos y muertos,
y su reino no tendrá fin.

Creo en el Espíritu Santo,
Señor y dador de vida,
que procede del Padre y del Hijo,
que con el Padre y el Hijo
recibe una misma adoración y gloria,
y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.
Confieso que hay un solo bautismo
para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos
y la vida del mundo futuro.
Amén.

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