Señor Jesús, esta noche también estoy aquí ante Ti. Tú has entrado en nuestra historia para redimirnos, has venido a librarnos de la oscuridad y regalarnos la luz, nos has revelado Tu Amor y Tu Ternura y Tu Misericordia.
Por eso te bendigo, por eso, esta noche también vengo a Ti, porque deseo tenerte en mi vida, Tú eres la Vida verdadera. Sé que ahora estás cerca de mí, que me abrazas con Tu Amor, que me proteges con Tu cercanía.
Derrama la paz en mi corazón, que en estos momentos pueda olvidarme de todos los problemas, para que pueda estar totalmente contigo.
Señor, por eso, te lo entrego todo, mi corazón, mis pensamientos: mi corazón para que lo llenes de Tu Amor, mis pensamientos para que los inspires con Tu Espíritu.
Señor, en estos momentos deseo entregarte todo lo que me pertenece, de manera especial, todo el pecado y todo el apego. Con Tu presencia, Oh Señor, rompe las cadenas de todo el apego, para que en la libertad de Tu Espíritu pueda caminar hacia Ti.
Con Tu Gracia purifica todos mis pasos equivocados, todos mis pecados, mis adicciones, todo aquello que prime mi conciencia. Ayúdanos Señor, a caminar perseverantemente por el camino de la salvación. Sé mi fuerza cuando yo la pierda, cuando no pueda seguir adelante. Sé la mano que me levanta cuando me caigo, cuando me duelen mis heridas, levántame Tú Oh Señor.
Señor, siento que estás cerca, reconozco Tu Presencia en tantas cosas, por eso te doy las gracias porque Tú estás siempre ahí por mí, para mí y porque me amas, porque Tu Presencia me consuela y me alienta. Gracias, Oh Señor
Señor, Tú cargaste sobre Tus hombros heridos la Cruz, caías pero no desistías del camino porque sabías que la Cruz te llevaba hacia la Resurrección. Yo te ruego Señor, para que con Tu Cruz, abarques todas las cruces de mi vida, toda la enfermedad, todo el sufrimiento, todos los problemas. Ayúdanos Señor a caminar con nuestras heridas de la vida, pero que esas heridas no sean la fuente del pecado, ni la razón de volver continuamente al pasado, sino que sean el espacio donde Tú vas a actuar.
No existe la herida que Tú no puedas sanar, no existe el dolor que Tú no puedas aliviar, no existe el problema que Tú no puedas solucionar. Por eso, deseo caminar contigo Señor, que Tú me guíes, para que saque la fuerza de Tu Palabra, que me mueva en el espacio de Tu Luz, porque Tú eres la Luz de mi camino.
Señor, ahora te ruego que envíes a Tu Santo Espíritu, derrámalo sobre mí, derrama Tu Santo Espíritu sobre mí para que me defienda, para que me proteja, para que me aliente, anime exhorte. Derrama Tu Santo Espíritu Señor en mi vida, para que haga arder mi corazón, para que no se canse de amar, especialmente al prójimo, a los enfermos , a los débiles.
Lléname de Tu Amor Oh Señor, ayúdame a que ese Amor se manifieste en la responsabilidad hacia los demás. En estos momentos, Oh Señor, deseo aceptarte a Ti como Dios, el único Dios en mi vida. En este momento, deseo comenzar todo de nuevo, deseo abandonar todo lo pecaminoso en mi vida y deseo ser tuyo, discípulo tuyo, testigo tuyo, apóstol tuyo en este mundo.
Que a todos vosotros, aquellos por los que habéis pedido esta noche, vuestras familias, bendiga Dios Todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Amén
FRA. PERICA OSTOJIĆ