El Domingo de Ramos o el Domingo de la Pasión de Nuestro Señor es tradicionalmente una introducción a la Semana Santa y la mayor fiesta cristiana, como preparación para la Pascua. Como en los años anteriores, la liturgia del Domingo de Ramos comenzó en las ruinas de la antigua iglesia parroquial. La procesión comenzó después de que fuese leído el Evangelio sobre la entrada de Nuestro Señor en Jerusalén y fuesen bendecidas de la palmas y ramas de olivo. La procesión, entonces, se dirigió hacia la iglesia de Santiago, donde el P. Karlo Lovric celebró la Santa Misa a las 11 de la mañana, mientras que el diácono p. Zvonimir Pavicic dijo la homilía. El coro parroquial, dirigido por Sor Irena Azinovic, hizo que la celebración fuese más solemne.
Había numerosos peregrinos de distintos lugares y ciudades de Bosnia y Herzegovina, así como de Irlanda, India, Austria, Francia, Alemania, Bélgica, Italia, Estados Unidos, Eslovenia, Ucrania, Polonia, Países Bajos y Croacia. Muchos peregrinos también subieron al Monte de las Apariciones para rezar el Rosario.
